Desde que Martín empezó a gatear se le abrió un mundo de posibilidades para explorar que ya pocas veces quería estar quieto. Le compramos juguetes como peluches, pelotas y objetos con sonido para ponérselos alrededor y que fuese él a buscarlos poco a poco con la idea de que al cogerlo jugaría, pero nada, cuando los alcanzaba no les hacía ca...
Si te gusto esta noticia puede que te interesen estas..